Sí hijito; en el cuerpo humano están todos los acontecimientos que a ejecutado la criatura; porque cada uno se hace su propio cielo; cada acto instante por instante, quedan grabados alrededor del cuerpo; lo mismo que en los soles; en las lumbreras solares todo queda escrito en sus coronas solares; y exsisten en ellos, las casas de escritura; lo de arriba es igual a lo de abajo; las casas son de fuego viviente; y se materializan en presencia de todos los espíritus que parten del cielo; partir del Reino, es nacer en nuevas vidas en lejanos planetas; allí el ajetreo es colosal; es tan colosal, que vosotros sóis desconocidos; todo se confunde en un ir y venir; este ajetreo es algo parecido a lo que ocurre en una estación de ferrocarril; unos llegan y otros parten; y se ven infinitas geometrías vivientes; y entre la multitud, está vuestra microscópica espiral; porque cada criatura llega, tal como salió; nada se trae de los planetas; a donde fué a perfeccionarse en el destino que pidió; ninguna propiedad se conoce en el Reino; no exsiste propiedad privada; porque el universo es de todos; y todo aquél ó aquella que defendió lo privado, no …