El número viviente participa en la construcción de un platillo volador.- El número viviente en su decisión de participar en una creación, lo hace pensando en la divina grandeza de Dios; tal como lo hace un espíritu pensante; cuando se está en la divina presencia de Dios, el espíritu ya tenga forma humana ya sea número viviente, se olvida de todo; todos ven que en el divino Padre Jehova, están todas las realizaciones que siente y desea llegar a ser una criatura; los seres pensantes en la divina presencia del Eterno, ven que la materia y el espíritu hacen todas las formas geométricas de vidas, que mente alguna pueda imaginar; todos ven que materia y espíritu conversan y que hacen divinas alianzas, para conocer lo que no conocen; lo que a todos parecía imposible y a lo que jamás nunca pensaron, allí en la divina presencia de Dios, lo ven como una realidad infinita; el divino espectáculo de ver a Dios en gloria y majestad, deja en todos un eterno recuerdo que nadie olvidará jamás; es la divina magnetización ó divino sello de Dios; es recibir un divino fluído de la misma divina causa, que creó todas las causas; el …