Sí hijo; el mundo de la prueba olvidó que el contenido del divino evangelio de dios, había que hacerlo costumbre en sí mismo; las formas de fé y sus características, que cada cual tuvo en la prueba de la vida, son desconocidas en el Reino de los Cielos; porque nadie pidió a dios, formas de fé que a todos habría de dividir en el lejano planeta de pruebas; el llamado mundo cristiano no se tomó el trabajo de verificar, lo cierto y verdadero de su propia forma de fé; este extraño olvido de comprobar lo propio, fué divinamente advertido en la divina parábola que dice: Ciegos guías de ciegos; es decir que los que se proclamaron en poseer la verdad, no la poseían; ellos cayeron en errores; porque para enseñar en forma fiel y perfecta lo de dios, los que tomaron la iniciativa de representarlo en la Tierra, no debieron haber conocido el extraño y desconocido mundo de las extrañas leyes del oro; toda extraña influencia que no pertenece al Reino de los Cielos, siempre confunde y pierde, a los que hablan de dios; porque se constituyen en malos ejemplos vivientes entre sus semejantes; y generaciones enteras que los imitan, …