TODO EL QUE PROYECTÓ SISTEMA DE VIDA, EN QUE NO SE TOMÓ EN CUENTA LAS ESCRITURAS DEL PADRE, NO ENTRARÁN AL REINO DE LOS CIELOS; ES MÁS FÁCIL QUE ENTRE AL REINO DEL PADRE, EL QUE PROYECTÓ SISTEMA DE VIDA, BASADO EN EL TRABAJO; PORQUE SÓLO LOS TRABAJADORES, TIENEN GANADA LA ENTRADA, AL REINO DE LOS CIELOS; PUES IMITARON LA FILOSOFÍA ETERNA DEL PADRE.-

Sí hijito; todo extraño sistema de vida que nó imitó al Padre en sus leyes de vida, no vuelve a entrar al Reino de los Cielos; infinitas humanidades vagan fuera del Reino de los Cielos; porque los que les dictaron las leyes en los lejanos mundos, no tomaron en cuenta las escrituras del Padre; porque tuvieron gobernantes que fueron ciegos guías de ciegos; porque sus errores fueron transmitiéndose de generación en generación; la prueba de la vida humana, fué y es en todo orden de cosas; el sistema de vida siempre influye en la entrada al Reino de los Cielos; porque la más elevada imitación a lo del Padre, está en la clase de vida que se vive en sí mismo; porque si se enseñó que Dios está en todas partes, también está dentro de cada cual; si se vivió no imitando al Padre, en lo moral, no se vé al Padre; porque la moral está primero en el Reino de los Cielos; la ciencia sin moral, no entra al Reino de los Cielos; es así que ningún sabio de este mundo, a vuelto a entrar al Reino de los Cielos; porque todos ellos conocieron una extraña moral; moral extraña salida de la extraña psicología del oro; una moral que no pidieron al Padre; porque nada de lo que impide el volver a entrar al Reino de los Cielos, fué pedido al Padre; la extraña moral del capitalismo, impide a los que la vivieron, el volver a entrar al Reino de los Cielos; he aquí que lo que no se pidió y se vivió, es causa suficiente para no volver a entrar al Reino del Padre; la desobediencia mayor salida del libre albedrío de la criatura, la constituye su propio extraño vivir; porque cuando se pide al Padre, causa de vida, todo pedido de vida se hace en igualdad de condiciones; siendo el modo de pensar diferente, se pide vivir un sistema de vida igual; porque todos piden al Padre, imitar en los lejanos mundos, lo que todos ven en el Reino; y lo que todos vísteis en el Reino, fué la divina igualdad en el vivir celestial; la misma igualdad que os enseña el Padre en sus escrituras; de verdad os digo, que todo el que imitó la igualdad del Padre en la prueba de la vida, entra al Reino de los Cielos; porque la más microscópica imitación a lo del Padre, es infinitamente premiada por el Padre; y de verdad os digo, que los que imitaron al Padre, fueron los trabajadores del mundo; y como hicieron causa común con el Padre en su modo de vivir, es que el comunismo terrestre, queda reinando en este mundo; el llamado capitalismo como no lo imitó en la prueba de la vida, no queda en este mundo; de verdad os digo, que todo lo que persiguió la bestia, queda en este mundo; porque todo perseguido en este extraño sistema de vida, fué perseguido por una extraña moral; lo que equivale a decir que el reo perseguía al juez; el condenado perseguía al salvo; de verdad os digo, que todo perseguido es primero delante del Padre; y todo perseguidor es el último; en la prueba de la vida, muchas filosofías probásteis; la más sublime y la única que queda hasta el fín de este planeta, es el trabajo; el trabajo que se ejecutó; nó el trabajo que se explotó; todos los que pensaron explotando, no entrarán al Reino de los Cielos; ni ninguno a entrado desde que el mundo es mundo; de verdad os digo, que la más denigrante de todas las filosofías de este mundo, es el sistema de vida que explota el trabajo de los demás; a este extraño sistema de vida, le llamáis capitalismo; una extraña forma de poseer más de lo que poseen otros; una extraña forma ideada por un grupo de ambiciosos; que se tomó el libertinaje, de no considerar la divina igualdad enseñada por el Padre; y quien no imita al Padre, nó vé la gloria del Padre; el llamado comunismo de este mundo, imita la divina filosofía del Padre; más, no quiere reconocer al Padre; tampoco verán al Padre; es más fácil que se vea al Padre, cuando no se reniega del Padre; de verdad os digo, última generación de la prueba de la vida, que en medio de temblores, terremotos, salidas de mar, lluvias de fuego, entonces creeréis en el Padre; lo que os enseñará, que sóis imperfectos, aún en vuestras propias creencias; en medio de un llorar y crujir de dientes, reconoceréis al Padre; sin señales no quisísteis reconocerlo; de verdad os digo, que todos los que pidieron señales ó pruebas para reconocer la divinidad, ninguno entrará al Reino de los Cielos; es más fácil que entre al Reino, uno que nó pidió señales ni pruebas; y que siempre creyó; he aquí que la verdadera fé, no exije condiciones; porque la criatura de este mundo, no conoce a ciencia cierta, la forma de su orígen; ni puede explicarlo; pero se le avisó a este mundo, que su Creador era infinito; la psicología de lo infinito en el Padre, fué una suprema prueba para todo entendimiento y para todos los sentidos de cada individualidad; es el alfa y la omega, del Dios de cada uno, hecho un sólo Dios nomás; cada individualidad, posee una imágen de su Creador; que sólo el Creador comprende; porque estando Dios en todas partes, está también en los que sienten, y no saben definir lo que sienten; de verdad os digo, que lo que sienten los humildes y sencillos de corazón, está más cerca del Padre; que lo que sienten y experimentan los orgullosos; todo orgulloso es un atrasado en la evolución; porque ninguno de ellos, vuelve a entrar al Reino de los Cielos; el que no se entre al lugar de su propio orígen, es una demostración de imperfección, dentro de la misma imperfección que se pidió conocer; los sistemas de vida que no quieren reconocer a un Creador del infinito, pasarán la más grande verguenza; porque al mismo Hijo Primogénito pedirán que los vuelva niños; más, quien renegó del Padre, en la prueba de la vida, también renegó del hijo; porque entre Padre é hijo, exsiste el comunismo carnal; para merecer la gloria de tener una carne eterna, había que creer, y por sobre todas las cosas, en el Creador de un futuro deseo; que en un instante dado, se hará realidad; todo tiempo pasado, es juzjado; de como pensásteis en el tiempo que pedísteis en la prueba de la vida, depende vuestro futuro; ó sóis de carne eterna ó seguís el camino de la mortalidad; a lo que el mundo de la prueba estaba acostumbrado; el recuerdo de haber sido niño, y la de volver a ser un niño, fascinará a toda la humanidad; incluyendo a los que negaron la exsistencia de un Creador; bienaventurados los que creyeron sin pedir pruebas; porque volverán a ser niños; niños de carne inmortal; porque la carne mortal, fué pedida en la prueba de la vida; y esta ya no es su reino; porque todo reino que se inició como un pedido de vida, tiene su término; la carne mortal, fué pedida por vosotros, porque no la conocíais; todo lo imaginable se pide al Padre; la carne eterna conque serán premiados los humildes y sinceros de corazón, es la misma carne del Reino de los Cielos; porque lo de arriba es igual a lo de abajo; quiere decir, que este mundo empieza a transformarse, hasta nivelarse con el Reino de los Cielos; conservando su dimensión microscópica; he aquí que de la Tierra misma nace la luz; porque de las mismas tinieblas, el Padre saca la luz; toda tiniebla es transformable a luz; y toda luz, cuando viola la ley del Padre, se vuelve tinieblas; este mundo está a las puertas, de ver prodigios, que ninguna generación vió; porque en la gloria de la Trinidad encarnada, participan todos los elementos de la naturaleza; lo que ninguna criatura humana puede hacerlo; de verdad os digo, que esta morada planetaria, entra a la fascinante era galáctica; la era inmortal; la era que eclipsa a todas las que hubieron en la Tierra; la era de los viajes interplanetarios; de los viajes de sol a sol; la era en que teniendo todos una carne eterna, podrán llegar a regiones infinitas del cosmos; a galáxias que ni soñaron en conocer, los hombres del mundo de la prueba; esta nueva era es el nuevo reino que se suma a otros infinitos reinos del universo; porque lo sucedido en determinado mundo, se viene repitiendo desde tiempos inmemoriales; sucede en infinitos planetas tierras; porque lo del Padre, nó está limitado a un sólo mundo; ¿no se os enseñó, que vuestro Dios era infinito? el que no lo creyó, no conocerá el infinito; no viajará a las lejanas galáxias ni a los gigantescos soles de colores del macrocosmos; quién no creyó en el infinito de su Creador, nó vé las maravillas del Creador; el que sí creyó, las verá; he aquí el significado de la divina parábola que dice: La fé mueve montañas; significa que el Hijo Primogénito moverá montañas, abrirá aguas, abrirá los océanos, tal como lo hizo en la era faraónica; cuando pidió al Padre, nacer como Moisés; porque todo espíritu nace de nuevo; libre albedrío tiene, de pedir al Padre, cuantas formas de vida desee; porque el Padre no tiene límites en nada imaginable; convertirá ríos de agua en sangre; y los que vuelvan a ser niños de carne eterna, viajarán de mundo en mundo; porque es por la fé viviente, que estas cosas ocurrirán; la fé abre nuevas rutas al espíritu; porque la fé, atrae al infinito del Padre; la fé se adelanta, al tiempo, el espacio y los hechos mismos; la fé pide al infinito; y el infinito materializa lo pedido; quien no cultivó la fé en la prueba de la vida, nada grabó para el infinito; porque un presente dado, se comunica con un presente del futuro; un presente que aún no se materializa; pero que está naciendo de lo invisible a lo visible; así como la fé no se deja ver, sólo se siente, así lo deseado no se deja ver; porque necesita de espacio, tiempo y lugar, para madurar; así es el universo viviente del Padre Jehova; es así que los que crearon el extraño sistema de vida, salido de las leyes del oro, lo hicieron sin fé eterna; porque no tomaron en cuenta, el divino evangelio del Padre; de verdad os digo, que la extraña fé de los capitalistas, es fé microscópica; lleva en sí misma, lo efímero; porque es una extraña fé que no tiene el sello del Padre; el alcance de esta fé, no alcanza a llegar al Reino de los Cielos; de verdad os digo, que la fé de un desposeído del mundo de la prueba, sí que alcanza al Reino de los Cielos; y la fé de un potentado, nadie la vé en el Reino del Padre; de verdad os digo, que mientras más rico se fué en la prueba de la vida, más infinitamente alejado del Reino de los Cielos, está el espíritu; los llamados ricos surgidos del extraño sistema de vida del oro, se convirtieron ellos mismos, en los grandes desheredados; porque ninguno entra al Reino de los Cielos; en esto consistía la prueba para ellos; porque la riqueza constituye la más dolorosa de las experiencias humanas; la más inmoral; la más injusta; y es la que hereda la más grande tragedia para el espíritu, que se tentó con tan extraña experiencia; toda la secuela de dolor y de injusticias, que esta extraña manía, de ciertos espíritus, se paga con lágrimas de sangre; he aquí que todo el que pidió al Padre, conocer cierta forma de vida, la pidió fijando el mismo espíritu, toda su responsabilidad moral; el que hizo sufrir a otro, la paga; y se le toma en cuenta, su grado de arrepentimiento; que es la única puerta de escape de las tinieblas; todo llamado rico, no supo sobreponerse a su propio complejo de poseer más que otro; todo lo que hace daño es complejo; todo rico creó un extraño sistema de vida y se enseñoreó él mismo en la injusticia; la historia de los llamados ricos de este planeta, será contada por las criaturas de las lejanas galáxias, como la historia-tragedia; ellos dirán en sus mundos: hubo en tiempos que escapan a la mente, un microscópico planeta llamado Tierra; era un planeta-polvo; uno de los infinitos, que gravitan en las infinitas dimensiones del espacio hecho presente; en este planeta-polvo, un grupo de demonios que pidió al Padre conocer las leyes de la luz, se tomó el libertinaje de crear un extraño y desconocido sistema de vida; cuyo dios fué el oro; todo sistema de vida, que posee una moral, opuesta a la divina moral de las escrituras del Creador, se le denomina extraño; porque tal sistema de vida, no está escrito en el Reino de los Cielos; y todo lo que no está escrito en el Reino, es extraño al Reino; y se dirá que estos demonios que pidieron conocer la forma humana en un lejano planeta Tierra, escandalizaron a ese mundo, por muchos siglos; y que la mayoría de ellos, terminó en el fuego viviente salido del Hijo Primogénito; una historia más, del cosmos infinito; porque siendo el Padre infinito y habiéndolo creado todo, nada imaginable de su divina creación tiene límites; es esí que cada planeta posee su historia planetaria; porque nadie es desheredado; ni la materia ni el espíritu; y si exsiste algún desheredado, su causa está en que violó la ley de amor, salida del Padre; es la historia de los llamados ricos de esta Tierra; que en todas las épocas del mundo de la prueba, se constituyeron, en el peor yugo de todas las generaciones; inmoralizaron a millones y millones, que si no los hubieran conocido, estarían en el Reino de los Cielos; pues todo lo que entra por los ojos, queda impregnado en la idea; y toda imitación nace de los ojos a su ejecución; si los ojos vieron a los ricos, el espíritu cuyos ojos vieron algo que no estaba escrito en el Reino de los Cielos, tal espíritu no entra al Reino de los Cielos; porque si todo se vuelve vida, en la divina presencia del Padre, los ojos hablan delante de su Creador, en sus leyes de ojos; tal como hablaría el espíritu en sus leyes de espíritu; y de los ojos, depende la entrada del espíritu, al Reino de los Cielos; el extraño mundo de los ricos, al darse en sí mismos, el escándalo, y toda inmoralidad salida de la extraña psicología de poseer más oro, condenaron a toda la humanidad; porque no hay ojo, que no haya sido sorprendido, por estos extraños libertinajes; el demonio se valió de este extraño sistema de vida, salido de los que más ambicionaron el oro; hizo de la ilusión, su arma favorita; llevó a la mente humana, por una extraña psicología y extraña moral; en circunstancias, que todo espíritu humano, al pedir una nueva forma de vida, pidió la divina psicología y moral, del evangelio del Padre Jehova; la pidió para sí mismos; la pidió en forma de su propio sistema de vida; la pidió en el todo sobre el todo; la pidió instante por instante; segundo por segundo; la pidió por sobre todas las cosas imaginables; la pidió por sobre todo extraño sistema de vida; y pidió ser probado en su libre albedrío viviente; escrito fué: todo espíritu es probado en la vida; he aquí que la mayoría de los de este mundo, no vivió para buscar el porque tenía vida; la mayoría vivió, porque había que vivir; de verdad os digo, que es más fácil que entre al Reino de los Cielos, uno que vivió para buscar el orígen de su propia vida; a que pueda entrar uno que vivió, porque había que vivir; escrito fué: El que busca encuentra; el que nada buscó en la prueba de la vida, nada hallará fuera de la tierra; el que buscó su propio orígen, lo hallará cuando parta de este mundo; toda imitación a lo escrito y enseñado en el divino evangelio del Padre, es infinitamente premiado por el Padre; los que nada imitaron de las escrituras, que ellos mismos pidieron al Padre, nada tendrán; he aquí la tragedia de todo indiferente, a los divinos mandatos del Padre; la prueba de la vida, estaba en sí mismo; en como la individualidad viviente, trató de formarse una imágen de su Dios; todo indiferente de la prueba de la vida, se creó su propio llorar y crujir de dientes; esta indiferencia estuvo en todo instante, reflejada en las propias actitudes de la individualidad pensante; he aquí que todo el que fué indiferente a las revoluciones que le tocó vivir, no entrará al Reino de los Cielos; ¿no sabían estos indiferentes, que el sistema de vida, que a ellos mismos explotaba, era injusto? de verdad os digo, que estos indiferentes fueron cómodos en la prueba de la vida; la extraña influencia que el extraño sistema de vida, salido del oro, ejerció en ellos, los hizo indiferentes y extraños a toda lucha por lograr una justicia; de verdad os digo, que todo indiferente tendrá su llorar y crujir de dientes; porque así como fueron indiferentes, así ellos encontrarán indiferencia, en los acontecimientos bíblicos que se ciernen sobre este mundo; cuando pidan ser resucitados a niños de doce años, se les negará la gloria de volver a ser un niño; cuando pidan ser curados de enfermedades en forma instantánea, se les negará; he aquí el fruto de todo él que fué indiferente, a las luchas de los demás; y si todo indiferente, no tuvo misericordia para con los demás, ellos tampoco la tendrán cuando pidan nacer de nuevo; cuando pidan al Padre, conocer otras formas de vida en otros mundos; y si todo indiferente es castigado, mil veces más, lo es el que persiguió y asesinó a revolucionario alguno; porque a profeta asesinó; he aquí el llorar y crujir de dientes, de todo tirano; más les valdría, no haber nacido en este mundo; porque todo tirano es maldito en el juicio final; ¡¡y pobre de aquél, que hable ó mire a maldito alguno!! porque por el habla y por la vista, le cae la ley de la maldición; de verdad os digo, que todo tirano que vivió en la prueba de la vida, será resucitado de entre los muertos, para ser juzjado entre los vivos; y todo martirizado, asesinado, violado, raptado, también resucitarán pidiendo justicia y acusando é identificando, a sus verdugos; he aquí la tragedia de todo tirano que se tomó el libertinaje, de hacer la justicia por su cuenta; la mayoría de estos demonios, intentará suicidarse; ni que lo intenten; si mil veces se suicidan, mil veces serán resucitados; he aquí un aviso para los actuales dictadores-asesinos; y ¡¡pobres de los que aplaudieron, a estos llamados dictadores!! porque los tales serán acusados de complicidad, con los violadores de la ley del Padre; ninguno que felicitó ó aplaudió en público, a estos demonios, ninguno entrará al Reino de los Cielos; ni ninguno a entrado; he aquí la tragedia de todo espíritu, que fué atrapado por el extraño libertinaje mental; la extraña ilusión del propio sentir, que se olvidó de la psicología del divino evangelio del Padre Jehova; todo extraño libertinaje, siempre termina en tragedia para el espíritu; porque el pedido de vida, se desequilibra; no establece la concordancia numérica, con la vibración numérica del premio; porque todo pedido de vida, incluye su premio por adelantado; he aquí la causa del sufrimiento que provoca el mal; a medida que la criatura genera ideas malas, vá generando su premio-tinieblas; y a medida que la criatura genera ideas buenas vá, generando su premio-luz; en todo instante, la sensación mental, le acusa; es así que el llorar y crujir de dientes, será universal; porque todos en la prueba de la vida, generásteis ideas; toda idea generada en la vida, es numérica; y vuestras promesas hechas al Padre, también lo son; para haber mantenido la misma vibración numérica a lo largo de la vida, toda criatura humana, debió haber conocido en su propio sistema de vida, la única psicología emanada del divino evangelio del Padre; pero ¿qué sucedió en vuestra prueba de vida? lo que os sucedió es que os dieron un extraño y desconocido sistema de vida, salido de las leyes del oro; este extraño sistema de vida, no está escrito en el Reino de los Cielos; es por ello que se llama extraño y desconocido; ¿y quién ó quiénes fueron los culpables? fueron los malditos faraones del pasado terrenal; el divino Padre Jehova, los maldice por sus crueldades y sus vanidades; todos los demonios de la dinastía faraónica, gimen en estos momentos, en las tinieblas de las lejanas galáxias; porque así como estos malditos asesinaron y esclavizaron a millones de hijos de la luz, así también se hace con ellos, en los lejanos planetas-infiernos; lo de arriba es igual a lo de abajo; lo que ellos hicieron abajo en el planeta Tierra, se hace con ellos arriba, en las lejanas galáxias; he aquí un divino juicio, del que nada sabe el mundo; porque a este mundo se le prometió la luz del conocimiento; he aquí que el divino Padre Jehova, sacó de este mundo, a las dinastías faraónicas; porque de haber seguido ellos, vosotros hijos de la Tierra, seríais sus esclavos; sólo el Padre sabe el destino y el futuro de cada mundo; he aquí una historia de justicia galáctica, que fascinará al mundo; porque muchas dinastías faraónicas, serán resucitadas de entre los muertos, para su juicio final; porque en virtud del libre albedrío de los espíritus, unos piden el juicio en el mismo planeta que les tocó vivir; otros piden fuera del planeta; otros lo piden en otras exsistencias, en otros mundos; el divino juicio a los demonios del pasado, marcará en este mundo, una época inmortal; el mundo los verá en todo su maldito esplendor; y al verlos, comprenderán que la soberbia y el orgullo de estos demonios, no tiene igual en la Tierra; la maldita psicología de ellos, está basada en el poder mental; un poder que será como un microbio; delante del hijo de Dios; porque entre el Hijo Primogénito y los malditos faraones, exsiste un infinito de diferencia; el hijo del Padre, es del macrocosmo llamado Reino de los Cielos; un divino lugar, en donde los tamaños y dimensiones, no tienen límites; los malditos faraones son del microcosmo; para que ellos puedan igualar al Hijo Primogénito del Padre, tienen que volver a nacer, tantas veces, como el número de granos de arena, contienen todos los desiertos de este mundo; en que cada grano, corresponda a una exsistencia; he aquí que todo poder mental, está subordinado al hijo de Dios; sólo el Padre le supera; porque el Padre es único; he aquí que la humildad, es el más grande poder en el Reino de los Cielos; la humildad del hijo de Dios, vence al orgullo y a toda vanidad; el divino término de Primogénito, significa que es primero en todo lo imaginable, después del Padre; primero en lo que hubo, hay y habrá; porque el divino término de Primogénito, no está en cálculo humano; está en la dimensión infinita; por lo tanto juzja lo humano; y todo el infinito que experimenta lo humano; lo conocido y lo desconocido; de verdad os digo, que toda civilización que hubo, siempre temió al hijo de Dios; porque los juicios no es exclusividad de nadie; y no hay civilización en el cosmos, que no haya sido juzjada por el hijo de Dios; las dinastías faraónicas del pasado, siempre temieron la divina reencarnación del hijo de Dios; porque sabían que habían violado la ley de amor del Padre Jehova; desde el mismo instante en que empezaron a esclavizar a otros, y disponer de la vida de los demás, cayeron ante el divino mandato, salido del Reino de los Cielos; la misión de estos seres galácticos, era hacer avanzar a este mundo, por la vía del amor; nó por la vía del atropello y la injusticia, como ellos lo hicieron; se tomaron un extraño libertinaje, no escrito en el Reino de los Cielos; es por esto que el divino Padre Jehova los maldice y les llama demonios; el mundo siempre los admiró por sus avanzadas ciencias; más, el mundo olvidó que estos demonios, también están para el fuicio final; ¿No os fué enseñado, que vuestro Dios juzjaría todas las cosas? de verdad os digo, que todos aquéllos que en la prueba de la vida, no hicieron esfuerzo mental para comprender, en la medida de sus capacidades, el término todas las cosas, ninguno entrará al Reino de los Cielos; porque el más microscópico esfuerzo mental, es infinitamente premiado por el Padre; el Padre premia lo mínimo y castiga lo mínimo; si es luz ó tinieblas respectivamente; el mundo se dejó fascinar por las ciencias ocultas de estos demonios; de verdad os digo, que todo ocultista, no entra al Reino de los Cielos; ni ninguno a vuelto a entrar al Reino del Padre; en el Reino de los Cielos, no se conoce el ocultismo; porque allí nadie oculta nada a nadie; y de verdad os digo, que ninguno de vosotros, pidió al Padre, ser ocultista; nadie pide al Padre, de lo que no vé en el Reino; todos los espíritus pensantes, tienen la tendencia natural, de pedir imitar, en lejanos planetas, lo que sus ojos ven en el Reino de los Cielos; porque saben que lo del Reino, no tiene igual en el resto del universo; todo ocultista debe sumar los segundos del tiempo en que fué ocultista; cada segundo le representa el tener que vivir una exsistencia, fuera del Reino de los Cielos; he aquí una trágica herencia, salida de las violaciones, de los que se creyeron perfectos, en otras épocas; porque no habrá ocultista, que no tenga su llorar y crujir de dientes; hubo muchas formas de buscar la verdad, sin caer en el extraño ocultismo; el ocultismo es una forma de egoísmo; aunque muchos crean lo contrario; lo oculto, no es mandato de la luz; en el Reino de los Cielos, todos son telepáticos y todos se leen la mente; sin que nadie moleste las intimidades de otro divino; es ley divina-natural; de verdad os digo, que el ocultismo, es uno de los árboles que no plantó el divino Padre Jehova; y de raíz será arrancado de este mundo; en el nuevo mundo omega, no habrá ocultista alguno; no habrá división alguna; no habrá seres con un extraño libertinaje mental; no exsistirá lo privado; no exsistirá la propiedad; porque el todo será de todos; será un mundo infinitamente opuesto, a lo que fué el mundo del oro; de verdad os digo, que los que se tomaron el extraño libertinaje, de crear un mundo injusto é inmoral, más les valdría no haber nacido en este mundo; porque todo atraso intencional, se paga segundo por segundo; instante por instante; idea por idea; porque los que más tuvieron oro, en este extraño sistema de vida, más intrigantes fueron; y mayor fué su propia tragedia; porque hasta lo que se poseyó en la prueba de la vida, es también juzjado; de verdad os digo, que toda intriga, todo complot, todo espionaje, toda compra de ideales, todo desabastecimiento intencional, todo terrorismo, todo asesinato salido de los que más tuvieron, con lágrimas de sangre lo pagarán; enormes listas de todos estos demonios, saldrán en todos los periódicos del mundo; porque todo juicio salido del Padre, se traducirá a todos los idiomas del mundo; y no escapará nadie; sea de la generación que sea; he aquí el llorar y crujir de dientes, de todo un mundo; un mundo que a cada instante, temerá ser enjuiciado en público; los creadores y sostenedores del extraño sistema de vida, serán los primeros en ser juzjados; todo sufrido y explotado, es último en el juicio final; y primero en los premios del Padre; de verdad os digo, que millones de esta generación, abandonarán a los suyos; por espanto a la verguenza; centenares se suicidarán; creyendo que con tal inmoralidad, escaparán al juicio y a la verguenza; profundo y craso error; porque si mil veces se suicidan, mil veces serán resucitados de entre los muertos; muchos se ocultarán en partes desoladas del planeta; les sorprenderá la vejez y la muerte; igualmente serán llamados de entre los muertos; he aquí en lo que terminará, el extraño mundo salido del cálculo al oro; he aquí el drama de los dramas; he aquí la tragedia de un extraño libertinaje viviente; he aquí el fín de la bestia; he aquí el fín de la extraña ilusión, que la posesión del oro, ejerció en ellos; he aquí la caída de un extraño mundo, surgido de un extraño complejo al oro; he aquí el fín de los que se entretuvieron dividiendo y viviendo a costillas de otros; he aquí la caída de satanás, que tomó la forma de extraño sistema de vida; he aquí el fín del extraño reinado del oro; he aquí el fín de la prueba de vida humana; he aquí un drama que será recordado, por muchos milenios en este mundo; he aquí que este extraño sistema de vida, está por entrar a la leyenda de tinieblas, en las lejanas galáxias; he aquí en lo que terminará, una extraña herencia salida del libre albedrío humano; he aquí una vez más, lo que cuesta el tomarse el libertinaje, de no tomar en cuenta al Padre, en la creación de sistemas de vida; he aquí el inmenso dolor moral, de millones y millones de ignorantes, que pusieron sus destinos, al servicio del oro; porque ningún ilusionado al oro, entrará al Reino de los Cielos; porque todos los llamados ricos surgidos del extraño sistema de vida del oro, fueron avisados hace ya muchos siglos; escrito fué para los que pidieron prueba de vida: Es más fácil que pase un camello por el ojo de una aguja, a que un rico pueda entrar al Reino de los Cielos; esto significa que ningún rico de ninguna época, a vuelto a entrar al Reino del Padre; y enseña cuan rigurosa es la ley divina; ningún rico tomó en cuenta en su prueba de vida, tal advertencia; he aquí que además de no entrar al Reino de los Cielos, los espíritus de los llamados ricos, tienen que enfrentar el juicio de la acusación de la propia advertencia que ellos mismos pidieron en el Reino de los Cielos; la advertencia se vuelve viviente en sus leyes de advertencia, delante del Padre Jehova; y la advertencia acusa a todo espíritu que habiendo hecho divina alianza con ella, no le hizo caso en la prueba de la vida; la acusación es por desprecio, a lo que había sido acordado en el Reino de los Cielos; de verdad os digo, que esta ley lo es también para todo el divino evangelio del Padre Jehova; de verdad os digo, que cada letra de todas las escrituras del Padre, hablan en sus leyes de letras, delante del Padre; todo lo creado, se vuelve viviente delante del Creador de las mismas; he aquí el llorar y crujir de dientes de todo el que no estudió al Padre, en su divino evangelio; porque ningún ingrato entrará al Reino de los Cielos; por cada letra que se queje al Padre, el espíritu culpable debe cumplir con una exsistencia, fuera del Reino de los Cielos; he aquí que muchos de los ingratos que cayeron en su prueba en la actual exsistencia, lo hicieron una vez más; porque en otras exsistencias hicieron lo mismo; fueron ingratos para con otras escrituras, en otros mundos; porque todo espíritu nace de nuevo; y al nacer de nuevo, nuevas exsistencias a tenido é infinitas tendrá; para vencer a la tiniebla llamada ingratitud, los espíritus por lo común necesitan de muchas exsistencias; la caída se debe a la extraña ilusión, que los extraños sistemas de vida interesados, ejercen una extraña influencia sobre su carácter.-

Sí hijito; todo extraño sistema de vida que nó imitó al Padre en sus leyes de vida, no vuelve a entrar al Reino de los Cielos; infinitas humanidades vagan fuera del Reino de los Cielos; porque los que les dictaron las leyes en los lejanos mundos, no tomaron en cuenta las escrituras del Padre; porque tuvieron gobernantes que fueron ciegos guías de ciegos; porque sus errores fueron transmitiéndose de generación en generación; la prueba de la vida humana, fué y es en todo orden de cosas; el sistema de vida siempre influye en la entrada al Reino de los Cielos; porque la más elevada imitación a lo del Padre, está en la clase de vida que se vive en sí mismo; porque si se enseñó que Dios está en todas partes, también está dentro de cada cual; si se vivió no imitando al Padre, en lo moral, no se vé al Padre; porque la moral está primero en el Reino de los Cielos; la ciencia sin moral, no entra al Reino de los Cielos; es así que ningún sabio de este mundo, a vuelto a entrar al Reino de los Cielos; porque todos ellos conocieron una extraña moral; moral extraña salida de la extraña psicología del oro; una moral que no pidieron al Padre; porque nada de lo que impide el volver a entrar al Reino de los Cielos, fué pedido al Padre; la extraña moral del capitalismo, impide a los que la vivieron, el volver a entrar al Reino de los Cielos; he aquí que lo que no se pidió y se vivió, es causa suficiente para no volver a entrar al Reino del Padre; la desobediencia mayor salida del libre albedrío de la criatura, la constituye su propio extraño vivir; porque cuando se pide al Padre, causa de vida, todo pedido de vida se hace en igualdad de condiciones; siendo el modo de pensar diferente, se pide vivir un sistema de vida igual; porque todos piden al Padre, imitar en los lejanos mundos, lo que todos ven en el Reino; y lo que todos vísteis en el Reino, fué la divina igualdad en el vivir celestial; la misma igualdad que os enseña el Padre en sus escrituras; de verdad os digo, que todo el que imitó la igualdad del Padre en la prueba de la vida, entra al Reino de los Cielos; porque la más microscópica imitación a lo del Padre, es infinitamente premiada por el Padre; y de verdad os digo, que los que imitaron al Padre, fueron los trabajadores del mundo; y como hicieron causa común con el Padre en su modo de vivir, es que el comunismo terrestre, queda reinando en este mundo; el llamado capitalismo como no lo imitó en la prueba de la vida, no queda en este mundo; de verdad os digo, que todo lo que persiguió la bestia, queda en este mundo; porque todo perseguido en este extraño sistema de vida, fué perseguido por una extraña moral; lo que equivale a decir que el reo perseguía al juez; el condenado perseguía al salvo; de verdad os digo, que todo perseguido es primero delante del Padre; y todo perseguidor es el último; en la prueba de la vida, muchas filosofías probásteis; la más sublime y la única que queda hasta el fín de este planeta, es el trabajo; el trabajo que se ejecutó; nó el trabajo que se explotó; todos los que pensaron explotando, no entrarán al Reino de los Cielos; ni ninguno a entrado desde que el mundo es mundo; de verdad os digo, que la más denigrante de todas las filosofías de este mundo, es el sistema de vida que explota el trabajo de los demás; a este extraño sistema de vida, le llamáis capitalismo; una extraña forma de poseer más de lo que poseen otros; una extraña forma ideada por un grupo de ambiciosos; que se tomó el libertinaje, de no considerar la divina igualdad enseñada por el Padre; y quien no imita al Padre, nó vé la gloria del Padre; el llamado comunismo de este mundo, imita la divina filosofía del Padre; más, no quiere reconocer al Padre; tampoco verán al Padre; es más fácil que se vea al Padre, cuando no se reniega del Padre; de verdad os digo, última generación de la prueba de la vida, que en medio de temblores, terremotos, salidas de mar, lluvias de fuego, entonces creeréis en el Padre; lo que os enseñará, que sóis imperfectos, aún en vuestras propias creencias; en medio de un llorar y crujir de dientes, reconoceréis al Padre; sin señales no quisísteis reconocerlo; de verdad os digo, que todos los que pidieron señales ó pruebas para reconocer la divinidad, ninguno entrará al Reino de los Cielos; es más fácil que entre al Reino, uno que nó pidió señales ni pruebas; y que siempre creyó; he aquí que la verdadera fé, no exije condiciones; porque la criatura de este mundo, no conoce a ciencia cierta, la forma de su orígen; ni puede explicarlo; pero se le avisó a este mundo, que su Creador era infinito; la psicología de lo infinito en el Padre, fué una suprema prueba para todo entendimiento y para todos los sentidos de cada individualidad; es el alfa y la omega, del Dios de cada uno, hecho un sólo Dios nomás; cada individualidad, posee una imágen de su Creador; que sólo el Creador comprende; porque estando Dios en todas partes, está también en los que sienten, y no saben definir lo que sienten; de verdad os digo, que lo que sienten los humildes y sencillos de corazón, está más cerca del Padre; que lo que sienten y experimentan los orgullosos; todo orgulloso es un atrasado en la evolución; porque ninguno de ellos, vuelve a entrar al Reino de los Cielos; el que no se entre al lugar de su propio orígen, es una demostración de imperfección, dentro de la misma imperfección que se pidió conocer; los sistemas de vida que no quieren reconocer a un Creador del infinito, pasarán la más grande verguenza; porque al mismo Hijo Primogénito pedirán que los vuelva niños; más, quien renegó del Padre, en la prueba de la vida, también renegó del hijo; porque entre Padre é hijo, exsiste el comunismo carnal; para merecer la gloria de tener una carne eterna, había que creer, y por sobre todas las cosas, en el Creador de un futuro deseo; que en un instante dado, se hará realidad; todo tiempo pasado, es juzjado; de como pensásteis en el tiempo que pedísteis en la prueba de la vida, depende vuestro futuro; ó sóis de carne eterna ó seguís el camino de la mortalidad; a lo que el mundo de la prueba estaba acostumbrado; el recuerdo de haber sido niño, y la de volver a ser un niño, fascinará a toda la humanidad; incluyendo a los que negaron la exsistencia de un Creador; bienaventurados los que creyeron sin pedir pruebas; porque volverán a ser niños; niños de carne inmortal; porque la carne mortal, fué pedida en la prueba de la vida; y esta ya no es su reino; porque todo reino que se inició como un pedido de vida, tiene su término; la carne mortal, fué pedida por vosotros, porque no la conocíais; todo lo imaginable se pide al Padre; la carne eterna conque serán premiados los humildes y sinceros de corazón, es la misma carne del Reino de los Cielos; porque lo de arriba es igual a lo de abajo; quiere decir, que este mundo empieza a transformarse, hasta nivelarse con el Reino de los Cielos; conservando su dimensión microscópica; he aquí que de la Tierra misma nace la luz; porque de las mismas tinieblas, el Padre saca la luz; toda tiniebla es transformable a luz; y toda luz, cuando viola la ley del Padre, se vuelve tinieblas; este mundo está a las puertas, de ver prodigios, que ninguna generación vió; porque en la gloria de la Trinidad encarnada, participan todos los elementos de la naturaleza; lo que ninguna criatura humana puede hacerlo; de verdad os digo, que esta morada planetaria, entra a la fascinante era galáctica; la era inmortal; la era que eclipsa a todas las que hubieron en la Tierra; la era de los viajes interplanetarios; de los viajes de sol a sol; la era en que teniendo todos una carne eterna, podrán llegar a regiones infinitas del cosmos; a galáxias que ni soñaron en conocer, los hombres del mundo de la prueba; esta nueva era es el nuevo reino que se suma a otros infinitos reinos del universo; porque lo sucedido en determinado mundo, se viene repitiendo desde tiempos inmemoriales; sucede en infinitos planetas tierras; porque lo del Padre, nó está limitado a un sólo mundo; ¿no se os enseñó, que vuestro Dios era infinito? el que no lo creyó, no conocerá el infinito; no viajará a las lejanas galáxias ni a los gigantescos soles de colores del macrocosmos; quién no creyó en el infinito de su Creador, nó vé las maravillas del Creador; el que sí creyó, las verá; he aquí el significado de la divina parábola que dice: La fé mueve montañas; significa que el Hijo Primogénito moverá montañas, abrirá aguas, abrirá los océanos, tal como lo hizo en la era faraónica; cuando pidió al Padre, nacer como Moisés; porque todo espíritu nace de nuevo; libre albedrío tiene, de pedir al Padre, cuantas formas de vida desee; porque el Padre no tiene límites en nada imaginable; convertirá ríos de agua en sangre; y los que vuelvan a ser niños de carne eterna, viajarán de mundo en mundo; porque es por la fé viviente, que estas cosas ocurrirán; la fé abre nuevas rutas al espíritu; porque la fé, atrae al infinito del Padre; la fé se adelanta, al tiempo, el espacio y los hechos mismos; la fé pide al infinito; y el infinito materializa lo pedido; quien no cultivó la fé en la prueba de la vida, nada grabó para el infinito; porque un presente dado, se comunica con un presente del futuro; un presente que aún no se materializa; pero que está naciendo de lo invisible a lo visible; así como la fé no se deja ver, sólo se siente, así lo deseado no se deja ver; porque necesita de espacio, tiempo y lugar, para madurar; así es el universo viviente del Padre Jehova; es así que los que crearon el extraño sistema de vida, salido de las leyes del oro, lo hicieron sin fé eterna; porque no tomaron en cuenta, el divino evangelio del Padre; de verdad os digo, que la extraña fé de los capitalistas, es fé microscópica; lleva en sí misma, lo efímero; porque es una extraña fé que no tiene el sello del Padre; el alcance de esta fé, no alcanza a llegar al Reino de los Cielos; de verdad os digo, que la fé de un desposeído del mundo de la prueba, sí que alcanza al Reino de los Cielos; y la fé de un potentado, nadie la vé en el Reino del Padre; de verdad os digo, que mientras más rico se fué en la prueba de la vida, más infinitamente alejado del Reino de los Cielos, está el espíritu; los llamados ricos surgidos del extraño sistema de vida del oro, se convirtieron ellos mismos, en los grandes desheredados; porque ninguno entra al Reino de los Cielos; en esto consistía la prueba para ellos; porque la riqueza constituye la más dolorosa de las experiencias humanas; la más inmoral; la más injusta; y es la que hereda la más grande tragedia para el espíritu, que se tentó con tan extraña experiencia; toda la secuela de dolor y de injusticias, que esta extraña manía, de ciertos espíritus, se paga con lágrimas de sangre; he aquí que todo el que pidió al Padre, conocer cierta forma de vida, la pidió fijando el mismo espíritu, toda su responsabilidad moral; el que hizo sufrir a otro, la paga; y se le toma en cuenta, su grado de arrepentimiento; que es la única puerta de escape de las tinieblas; todo llamado rico, no supo sobreponerse a su propio complejo de poseer más que otro; todo lo que hace daño es complejo; todo rico creó un extraño sistema de vida y se enseñoreó él mismo en la injusticia; la historia de los llamados ricos de este planeta, será contada por las criaturas de las lejanas galáxias, como la historia-tragedia; ellos dirán en sus mundos: hubo en tiempos que escapan a la mente, un microscópico planeta llamado Tierra; era un planeta-polvo; uno de los infinitos, que gravitan en las infinitas dimensiones del espacio hecho presente; en este planeta-polvo, un grupo de demonios que pidió al Padre conocer las leyes de la luz, se tomó el libertinaje de crear un extraño y desconocido sistema de vida; cuyo dios fué el oro; todo sistema de vida, que posee una moral, opuesta a la divina moral de las escrituras del Creador, se le denomina extraño; porque tal sistema de vida, no está escrito en el Reino de los Cielos; y todo lo que no está escrito en el Reino, es extraño al Reino; y se dirá que estos demonios que pidieron conocer la forma humana en un lejano planeta Tierra, escandalizaron a ese mundo, por muchos siglos; y que la mayoría de ellos, terminó en el fuego viviente salido del Hijo Primogénito; una historia más, del cosmos infinito; porque siendo el Padre infinito y habiéndolo creado todo, nada imaginable de su divina creación tiene límites; es esí que cada planeta posee su historia planetaria; porque nadie es desheredado; ni la materia ni el espíritu; y si exsiste algún desheredado, su causa está en que violó la ley de amor, salida del Padre; es la historia de los llamados ricos de esta Tierra; que en todas las épocas del mundo de la prueba, se constituyeron, en el peor yugo de todas las generaciones; inmoralizaron a millones y millones, que si no los hubieran conocido, estarían en el Reino de los Cielos; pues todo lo que entra por los ojos, queda impregnado en la idea; y toda imitación nace de los ojos a su ejecución; si los ojos vieron a los ricos, el espíritu cuyos ojos vieron algo que no estaba escrito en el Reino de los Cielos, tal espíritu no entra al Reino de los Cielos; porque si todo se vuelve vida, en la divina presencia del Padre, los ojos hablan delante de su Creador, en sus leyes de ojos; tal como hablaría el espíritu en sus leyes de espíritu; y de los ojos, depende la entrada del espíritu, al Reino de los Cielos; el extraño mundo de los ricos, al darse en sí mismos, el escándalo, y toda inmoralidad salida de la extraña psicología de poseer más oro, condenaron a toda la humanidad; porque no hay ojo, que no haya sido sorprendido, por estos extraños libertinajes; el demonio se valió de este extraño sistema de vida, salido de los que más ambicionaron el oro; hizo de la ilusión, su arma favorita; llevó a la mente humana, por una extraña psicología y extraña moral; en circunstancias, que todo espíritu humano, al pedir una nueva forma de vida, pidió la divina psicología y moral, del evangelio del Padre Jehova; la pidió para sí mismos; la pidió en forma de su propio sistema de vida; la pidió en el todo sobre el todo; la pidió instante por instante; segundo por segundo; la pidió por sobre todas las cosas imaginables; la pidió por sobre todo extraño sistema de vida; y pidió ser probado en su libre albedrío viviente; escrito fué: todo espíritu es probado en la vida; he aquí que la mayoría de los de este mundo, no vivió para buscar el porque tenía vida; la mayoría vivió, porque había que vivir; de verdad os digo, que es más fácil que entre al Reino de los Cielos, uno que vivió para buscar el orígen de su propia vida; a que pueda entrar uno que vivió, porque había que vivir; escrito fué: El que busca encuentra; el que nada buscó en la prueba de la vida, nada hallará fuera de la tierra; el que buscó su propio orígen, lo hallará cuando parta de este mundo; toda imitación a lo escrito y enseñado en el divino evangelio del Padre, es infinitamente premiado por el Padre; los que nada imitaron de las escrituras, que ellos mismos pidieron al Padre, nada tendrán; he aquí la tragedia de todo indiferente, a los divinos mandatos del Padre; la prueba de la vida, estaba en sí mismo; en como la individualidad viviente, trató de formarse una imágen de su Dios; todo indiferente de la prueba de la vida, se creó su propio llorar y crujir de dientes; esta indiferencia estuvo en todo instante, reflejada en las propias actitudes de la individualidad pensante; he aquí que todo el que fué indiferente a las revoluciones que le tocó vivir, no entrará al Reino de los Cielos; ¿no sabían estos indiferentes, que el sistema de vida, que a ellos mismos explotaba, era injusto? de verdad os digo, que estos indiferentes fueron cómodos en la prueba de la vida; la extraña influencia que el extraño sistema de vida, salido del oro, ejerció en ellos, los hizo indiferentes y extraños a toda lucha por lograr una justicia; de verdad os digo, que todo indiferente tendrá su llorar y crujir de dientes; porque así como fueron indiferentes, así ellos encontrarán indiferencia, en los acontecimientos bíblicos que se ciernen sobre este mundo; cuando pidan ser resucitados a niños de doce años, se les negará la gloria de volver a ser un niño; cuando pidan ser curados de enfermedades en forma instantánea, se les negará; he aquí el fruto de todo él que fué indiferente, a las luchas de los demás; y si todo indiferente, no tuvo misericordia para con los demás, ellos tampoco la tendrán cuando pidan nacer de nuevo; cuando pidan al Padre, conocer otras formas de vida en otros mundos; y si todo indiferente es castigado, mil veces más, lo es el que persiguió y asesinó a revolucionario alguno; porque a profeta asesinó; he aquí el llorar y crujir de dientes, de todo tirano; más les valdría, no haber nacido en este mundo; porque todo tirano es maldito en el juicio final; ¡¡y pobre de aquél, que hable ó mire a maldito alguno!! porque por el habla y por la vista, le cae la ley de la maldición; de verdad os digo, que todo tirano que vivió en la prueba de la vida, será resucitado de entre los muertos, para ser juzjado entre los vivos; y todo martirizado, asesinado, violado, raptado, también resucitarán pidiendo justicia y acusando é identificando, a sus verdugos; he aquí la tragedia de todo tirano que se tomó el libertinaje, de hacer la justicia por su cuenta; la mayoría de estos demonios, intentará suicidarse; ni que lo intenten; si mil veces se suicidan, mil veces serán resucitados; he aquí un aviso para los actuales dictadores-asesinos; y ¡¡pobres de los que aplaudieron, a estos llamados dictadores!! porque los tales serán acusados de complicidad, con los violadores de la ley del Padre; ninguno que felicitó ó aplaudió en público, a estos demonios, ninguno entrará al Reino de los Cielos; ni ninguno a entrado; he aquí la tragedia de todo espíritu, que fué atrapado por el extraño libertinaje mental; la extraña ilusión del propio sentir, que se olvidó de la psicología del divino evangelio del Padre Jehova; todo extraño libertinaje, siempre termina en tragedia para el espíritu; porque el pedido de vida, se desequilibra; no establece la concordancia numérica, con la vibración numérica del premio; porque todo pedido de vida, incluye su premio por adelantado; he aquí la causa del sufrimiento que provoca el mal; a medida que la criatura genera ideas malas, vá generando su premio-tinieblas; y a medida que la criatura genera ideas buenas vá, generando su premio-luz; en todo instante, la sensación mental, le acusa; es así que el llorar y crujir de dientes, será universal; porque todos en la prueba de la vida, generásteis ideas; toda idea generada en la vida, es numérica; y vuestras promesas hechas al Padre, también lo son; para haber mantenido la misma vibración numérica a lo largo de la vida, toda criatura humana, debió haber conocido en su propio sistema de vida, la única psicología emanada del divino evangelio del Padre; pero ¿qué sucedió en vuestra prueba de vida? lo que os sucedió es que os dieron un extraño y desconocido sistema de vida, salido de las leyes del oro; este extraño sistema de vida, no está escrito en el Reino de los Cielos; es por ello que se llama extraño y desconocido; ¿y quién ó quiénes fueron los culpables? fueron los malditos faraones del pasado terrenal; el divino Padre Jehova, los maldice por sus crueldades y sus vanidades; todos los demonios de la dinastía faraónica, gimen en estos momentos, en las tinieblas de las lejanas galáxias; porque así como estos malditos asesinaron y esclavizaron a millones de hijos de la luz, así también se hace con ellos, en los lejanos planetas-infiernos; lo de arriba es igual a lo de abajo; lo que ellos hicieron abajo en el planeta Tierra, se hace con ellos arriba, en las lejanas galáxias; he aquí un divino juicio, del que nada sabe el mundo; porque a este mundo se le prometió la luz del conocimiento; he aquí que el divino Padre Jehova, sacó de este mundo, a las dinastías faraónicas; porque de haber seguido ellos, vosotros hijos de la Tierra, seríais sus esclavos; sólo el Padre sabe el destino y el futuro de cada mundo; he aquí una historia de justicia galáctica, que fascinará al mundo; porque muchas dinastías faraónicas, serán resucitadas de entre los muertos, para su juicio final; porque en virtud del libre albedrío de los espíritus, unos piden el juicio en el mismo planeta que les tocó vivir; otros piden fuera del planeta; otros lo piden en otras exsistencias, en otros mundos; el divino juicio a los demonios del pasado, marcará en este mundo, una época inmortal; el mundo los verá en todo su maldito esplendor; y al verlos, comprenderán que la soberbia y el orgullo de estos demonios, no tiene igual en la Tierra; la maldita psicología de ellos, está basada en el poder mental; un poder que será como un microbio; delante del hijo de Dios; porque entre el Hijo Primogénito y los malditos faraones, exsiste un infinito de diferencia; el hijo del Padre, es del macrocosmo llamado Reino de los Cielos; un divino lugar, en donde los tamaños y dimensiones, no tienen límites; los malditos faraones son del microcosmo; para que ellos puedan igualar al Hijo Primogénito del Padre, tienen que volver a nacer, tantas veces, como el número de granos de arena, contienen todos los desiertos de este mundo; en que cada grano, corresponda a una exsistencia; he aquí que todo poder mental, está subordinado al hijo de Dios; sólo el Padre le supera; porque el Padre es único; he aquí que la humildad, es el más grande poder en el Reino de los Cielos; la humildad del hijo de Dios, vence al orgullo y a toda vanidad; el divino término de Primogénito, significa que es primero en todo lo imaginable, después del Padre; primero en lo que hubo, hay y habrá; porque el divino término de Primogénito, no está en cálculo humano; está en la dimensión infinita; por lo tanto juzja lo humano; y todo el infinito que experimenta lo humano; lo conocido y lo desconocido; de verdad os digo, que toda civilización que hubo, siempre temió al hijo de Dios; porque los juicios no es exclusividad de nadie; y no hay civilización en el cosmos, que no haya sido juzjada por el hijo de Dios; las dinastías faraónicas del pasado, siempre temieron la divina reencarnación del hijo de Dios; porque sabían que habían violado la ley de amor del Padre Jehova; desde el mismo instante en que empezaron a esclavizar a otros, y disponer de la vida de los demás, cayeron ante el divino mandato, salido del Reino de los Cielos; la misión de estos seres galácticos, era hacer avanzar a este mundo, por la vía del amor; nó por la vía del atropello y la injusticia, como ellos lo hicieron; se tomaron un extraño libertinaje, no escrito en el Reino de los Cielos; es por esto que el divino Padre Jehova los maldice y les llama demonios; el mundo siempre los admiró por sus avanzadas ciencias; más, el mundo olvidó que estos demonios, también están para el fuicio final; ¿No os fué enseñado, que vuestro Dios juzjaría todas las cosas? de verdad os digo, que todos aquéllos que en la prueba de la vida, no hicieron esfuerzo mental para comprender, en la medida de sus capacidades, el término todas las cosas, ninguno entrará al Reino de los Cielos; porque el más microscópico esfuerzo mental, es infinitamente premiado por el Padre; el Padre premia lo mínimo y castiga lo mínimo; si es luz ó tinieblas respectivamente; el mundo se dejó fascinar por las ciencias ocultas de estos demonios; de verdad os digo, que todo ocultista, no entra al Reino de los Cielos; ni ninguno a vuelto a entrar al Reino del Padre; en el Reino de los Cielos, no se conoce el ocultismo; porque allí nadie oculta nada a nadie; y de verdad os digo, que ninguno de vosotros, pidió al Padre, ser ocultista; nadie pide al Padre, de lo que no vé en el Reino; todos los espíritus pensantes, tienen la tendencia natural, de pedir imitar, en lejanos planetas, lo que sus ojos ven en el Reino de los Cielos; porque saben que lo del Reino, no tiene igual en el resto del universo; todo ocultista debe sumar los segundos del tiempo en que fué ocultista; cada segundo le representa el tener que vivir una exsistencia, fuera del Reino de los Cielos; he aquí una trágica herencia, salida de las violaciones, de los que se creyeron perfectos, en otras épocas; porque no habrá ocultista, que no tenga su llorar y crujir de dientes; hubo muchas formas de buscar la verdad, sin caer en el extraño ocultismo; el ocultismo es una forma de egoísmo; aunque muchos crean lo contrario; lo oculto, no es mandato de la luz; en el Reino de los Cielos, todos son telepáticos y todos se leen la mente; sin que nadie moleste las intimidades de otro divino; es ley divina-natural; de verdad os digo, que el ocultismo, es uno de los árboles que no plantó el divino Padre Jehova; y de raíz será arrancado de este mundo; en el nuevo mundo omega, no habrá ocultista alguno; no habrá división alguna; no habrá seres con un extraño libertinaje mental; no exsistirá lo privado; no exsistirá la propiedad; porque el todo será de todos; será un mundo infinitamente opuesto, a lo que fué el mundo del oro; de verdad os digo, que los que se tomaron el extraño libertinaje, de crear un mundo injusto é inmoral, más les valdría no haber nacido en este mundo; porque todo atraso intencional, se paga segundo por segundo; instante por instante; idea por idea; porque los que más tuvieron oro, en este extraño sistema de vida, más intrigantes fueron; y mayor fué su propia tragedia; porque hasta lo que se poseyó en la prueba de la vida, es también juzjado; de verdad os digo, que toda intriga, todo complot, todo espionaje, toda compra de ideales, todo desabastecimiento intencional, todo terrorismo, todo asesinato salido de los que más tuvieron, con lágrimas de sangre lo pagarán; enormes listas de todos estos demonios, saldrán en todos los periódicos del mundo; porque todo juicio salido del Padre, se traducirá a todos los idiomas del mundo; y no escapará nadie; sea de la generación que sea; he aquí el llorar y crujir de dientes, de todo un mundo; un mundo que a cada instante, temerá ser enjuiciado en público; los creadores y sostenedores del extraño sistema de vida, serán los primeros en ser juzjados; todo sufrido y explotado, es último en el juicio final; y primero en los premios del Padre; de verdad os digo, que millones de esta generación, abandonarán a los suyos; por espanto a la verguenza; centenares se suicidarán; creyendo que con tal inmoralidad, escaparán al juicio y a la verguenza; profundo y craso error; porque si mil veces se suicidan, mil veces serán resucitados de entre los muertos; muchos se ocultarán en partes desoladas del planeta; les sorprenderá la vejez y la muerte; igualmente serán llamados de entre los muertos; he aquí en lo que terminará, el extraño mundo salido del cálculo al oro; he aquí el drama de los dramas; he aquí la tragedia de un extraño libertinaje viviente; he aquí el fín de la bestia; he aquí el fín de la extraña ilusión, que la posesión del oro, ejerció en ellos; he aquí la caída de un extraño mundo, surgido de un extraño complejo al oro; he aquí el fín de los que se entretuvieron dividiendo y viviendo a costillas de otros; he aquí la caída de satanás, que tomó la forma de extraño sistema de vida; he aquí el fín del extraño reinado del oro; he aquí el fín de la prueba de vida humana; he aquí un drama que será recordado, por muchos milenios en este mundo; he aquí que este extraño sistema de vida, está por entrar a la leyenda de tinieblas, en las lejanas galáxias; he aquí en lo que terminará, una extraña herencia salida del libre albedrío humano; he aquí una vez más, lo que cuesta el tomarse el libertinaje, de no tomar en cuenta al Padre, en la creación de sistemas de vida; he aquí el inmenso dolor moral, de millones y millones de ignorantes, que pusieron sus destinos, al servicio del oro; porque ningún ilusionado al oro, entrará al Reino de los Cielos; porque todos los llamados ricos surgidos del extraño sistema de vida del oro, fueron avisados hace ya muchos siglos; escrito fué para los que pidieron prueba de vida: Es más fácil que pase un camello por el ojo de una aguja, a que un rico pueda entrar al Reino de los Cielos; esto significa que ningún rico de ninguna época, a vuelto a entrar al Reino del Padre; y enseña cuan rigurosa es la ley divina; ningún rico tomó en cuenta en su prueba de vida, tal advertencia; he aquí que además de no entrar al Reino de los Cielos, los espíritus de los llamados ricos, tienen que enfrentar el juicio de la acusación de la propia advertencia que ellos mismos pidieron en el Reino de los Cielos; la advertencia se vuelve viviente en sus leyes de advertencia, delante del Padre Jehova; y la advertencia acusa a todo espíritu que habiendo hecho divina alianza con ella, no le hizo caso en la prueba de la vida; la acusación es por desprecio, a lo que había sido acordado en el Reino de los Cielos; de verdad os digo, que esta ley lo es también para todo el divino evangelio del Padre Jehova; de verdad os digo, que cada letra de todas las escrituras del Padre, hablan en sus leyes de letras, delante del Padre; todo lo creado, se vuelve viviente delante del Creador de las mismas; he aquí el llorar y crujir de dientes de todo el que no estudió al Padre, en su divino evangelio; porque ningún ingrato entrará al Reino de los Cielos; por cada letra que se queje al Padre, el espíritu culpable debe cumplir con una exsistencia, fuera del Reino de los Cielos; he aquí que muchos de los ingratos que cayeron en su prueba en la actual exsistencia, lo hicieron una vez más; porque en otras exsistencias hicieron lo mismo; fueron ingratos para con otras escrituras, en otros mundos; porque todo espíritu nace de nuevo; y al nacer de nuevo, nuevas exsistencias a tenido é infinitas tendrá; para vencer a la tiniebla llamada ingratitud, los espíritus por lo común necesitan de muchas exsistencias; la caída se debe a la extraña ilusión, que los extraños sistemas de vida interesados, ejercen una extraña influencia sobre su carácter.-